Hicimos las compras por la mañana en Valladolid y nos fuimos a nuestro nuevo destino, paramos en la joya de las ruina mayas EK BALAM y la recorrimos, subiendo bajando, trepando en plena selva.Están muy cuidadas y es una visita imprescindible.
Al salir íbamos a ir al cenote pero nos cobrarban muy caro y decidimos irnos a rio lagartos directamente. En México COBRAN POR TODO , incluso a los niños y estudiantes, cosa que en otros paises no ocurre.
Llegamos río lagartos, por la selva y sus mariposas y claro el hotel CASA DE PESCADORES estaba enfrente del río que parece un mar con muchos brazos y la habitación, con las camas desde las que se veía toda la desembocadura,o sea perfecto, eso sí ,los dueños muy amables pero empalagosos.
Nos fuimos a comer a una taberna pescado frito recién pescado con una Montejo(cerveza algo fuerte).Por la tarde negociamos una barca que nos llevase a la playa y al día siguiente a ver flamencos, cocodrilos, águilas pescadoras .... y el baño maya,
Otra playa que parece el paraiso, es de los lugareños pero estábamos solos, esta vez con chiringuito y música local, o sea TOTAL.Volvimos cenamos en el hotel :langosta, pescado vario.y al día siguiente el SUBIDÓN.
El guía contratado era rarísimo, menos mal que al final vino JESÚS, tambien imprescindible, que nos llevó en su lancha por el río viendo todo tipo de aves, garzas, águilas pescadoras, cormoranes, halcones,-----mapaches y buscando cocodrilos entre los manglares, como había sido guía de la reserva, nos contó de todo, vimos los bellos flamencos y llegamos a una zona donde nos pusimos en salmuera, era una salina en el río, estuvimos veinte minutos dentro y después Jesús de uno en uno, nos dió un masaje con arcilla blanca que te hacia levitar a los cielos, cuando ví a mis hijos con semejante pinta me descojonaba sola, teniendo en cuenta que a continuación me tocaba a mí.
A continuación fuimos viendo más aves en el barco, con la arcilla en el cuerpo secándose, a la hora llegamos a la playa del día anterior donde nos volvió a dar un masaje celestial pero con la arena de la playa par quitarnos toda la arcilla y a continuación al agua patos. INOLVIDBLE
Para no perder esa sensación indescriptible, nos quedamos en la playa, en las hamacas tan ricamente, por la tarde nos vino a buscar el primer guia, y nos tomamos una cerveza con el, nos quería llevar de fiesta,...por la noche, pero negociamos salir con la barca a buscar cocodrilos por la noche y así quedamos
Nos fuimos a la taberna y nos encontramos a Jesús, nuestro maravilloso guía, el cual quería llevarnos a bailar y sobretodo que Vera bailase con su hijo Torito, nos echamos muchas risas. Mis hijos se fueron de rodeo.Por la noche al final Jesús nos llevó a buscar cocodrilos, solo vimos sus ojos, te da una sensación estar en el bote a nada de ellos y con la muerte tan cerca , pero también inolvidable.
Nos fuimos a la cama agotados como todos los días y pensando en el siguiente destino